Usos y preparación
El Ossobuco es ideal para cocciones lentas que permiten ablandar la carne y liberar el sabor de la médula ósea. Algunas formas comunes de preparación incluyen:
Estofado: Cocinar a fuego lento en líquidos como caldo, vino, y tomates para obtener una carne tierna y jugosa que se desprende del hueso. Este método es típico en el plato italiano tradicional «»Ossobuco alla Milanese»».
Braiseado: Sellar el ossobuco en una sartén caliente y luego cocinar a fuego lento en una mezcla de líquidos y especias. Este proceso asegura que la carne se vuelva extremadamente tierna y absorba los sabores de la salsa.
Sopa o Guiso: Utilizar el ossobuco para hacer sopas o guisos ricos y nutritivos, donde el hueso y la médula aportan un sabor profundo y una textura rica al caldo.
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